miércoles, 1 de diciembre de 2010
ED GEIN
Su nombre real era Edward Theodore Gein. Nació en 1906, en Plainfield. A lo largo de su infancia, fue víctima de su perturbada madre. Mujer obsesionada por la religión, aborrece la sociedad y todo lo que la envuelve, para ella una sociedad llena de mentira y de pecado. Ella sentía asco por su marido, ya que representaba todo aquello que ella aborrecía. Un hombre detestable, aficionado a la bebida y a pegar a sus 2 hijos. Ed vivió su infancia en un ambiente represivo y prácticamente carecía de contacto con los chicos de su edad. Pronto se convertiría en un hombre solitario, excéntrico y tímido. A los 39 años sufrió la pérdida de su madre, y unos años antes la de su padre y hermano mayor.
Ésta es la historia real que inspiró "Psicosis", "La Matanza de Texas" y "El silencio de los corderos".
El 8 de Diciembre de 1954, un granjero entró en "la taberna de los Hogan" y descubrió un gran reguero de sangre que cubría las tablas de madera del suelo. La propietaria Mary Hogan, había desaparecido.
Las investigaciones del sheriff no obtuvieron su fruto y el caso quedó archivado.
Tres años más tarde, otro espantoso crimen tuvo lugar, Ed Gein asesinaba a la dueña de la ferretería, Bernice Worden, también se hallaron manchas de sangre y el cadáver había desaparecido. Pero ésta vez, se encontró una pista esclarecedora, la última venta fue anotada por Bernice en el libro de contabilidad a nombre de Ed Gein. Pronto fue arrestado, y se dirigieron a su casa para realizar el registro. Al abrir la puerta, se pudo ver el cuerpo de Bernice colgado de un gancho por el tobillo y con un alambre le habían sujetado el otro pie a una polea. Habían rajado el cuerpo desde el pecho hasta la base del abdomen, y las tripas brillaban como si las hubiesen lavado y limpiado.
Por todas partes se veían montañas de basura y desperdicios, cajas de cartón, latas vacías, herramientas oxidadas, excrementos, revistas pornográficas, de terror y de anatomía humana, chicles pegados en las tazas y una dentadura sobre el mantel de la mesa. En la cocina, centro de los macabros acontecimientos, había varios cráneos esparcidos por el suelo, algunos servían de cuencos y otros yacían intactos.
Una inspección más detenida reveló que una de las sillas de la cocina estaba hecha con piel humana, como las pantallas de las lámparas, las papeleras, las fundas de los cuchillos e incluso alguna prenda de vestir, como un chaleco o un cinturón formado con pezones humanos.
Entre los más atroces descubrimientos, se encontraron unas cajas con los restos humanos pertenecientes a diferentes cuerpos sin identificar, el corazón y la cabeza amputada de Bernice Worden en una bolsa de plástico, una colección de nueve máscaras de piel humana con el pelo intacto, de las cuales, cuatro colgaban en la pared que rodeaba la cama de Gein.
La única habitación de la casa que parecía normal era una sellada con tablones en la puerta y perfectamente ordenada... la de su madre. Desde que su madre muriera en 1945, doce años antes, la habitación había estado cerrada con clavos como un sepulcro. Ed explicó a la policía después de su detención que después de su fallecimiento, su madre se mantuvo en contacto con él durante más de un año, hablándole mientras se adormecía. Dijo que había sido en esa época cuando desarrolló su fascinación por la anatomía. Le fascinaban los reportajes sobre la operación de cambio de sexo y se planteó el convertirse él mismo en mujer.
Ésta es la historia real que inspiró "Psicosis", "La Matanza de Texas" y "El silencio de los corderos".
El 8 de Diciembre de 1954, un granjero entró en "la taberna de los Hogan" y descubrió un gran reguero de sangre que cubría las tablas de madera del suelo. La propietaria Mary Hogan, había desaparecido.
Las investigaciones del sheriff no obtuvieron su fruto y el caso quedó archivado.
Tres años más tarde, otro espantoso crimen tuvo lugar, Ed Gein asesinaba a la dueña de la ferretería, Bernice Worden, también se hallaron manchas de sangre y el cadáver había desaparecido. Pero ésta vez, se encontró una pista esclarecedora, la última venta fue anotada por Bernice en el libro de contabilidad a nombre de Ed Gein. Pronto fue arrestado, y se dirigieron a su casa para realizar el registro. Al abrir la puerta, se pudo ver el cuerpo de Bernice colgado de un gancho por el tobillo y con un alambre le habían sujetado el otro pie a una polea. Habían rajado el cuerpo desde el pecho hasta la base del abdomen, y las tripas brillaban como si las hubiesen lavado y limpiado.
Por todas partes se veían montañas de basura y desperdicios, cajas de cartón, latas vacías, herramientas oxidadas, excrementos, revistas pornográficas, de terror y de anatomía humana, chicles pegados en las tazas y una dentadura sobre el mantel de la mesa. En la cocina, centro de los macabros acontecimientos, había varios cráneos esparcidos por el suelo, algunos servían de cuencos y otros yacían intactos.
Una inspección más detenida reveló que una de las sillas de la cocina estaba hecha con piel humana, como las pantallas de las lámparas, las papeleras, las fundas de los cuchillos e incluso alguna prenda de vestir, como un chaleco o un cinturón formado con pezones humanos.
Entre los más atroces descubrimientos, se encontraron unas cajas con los restos humanos pertenecientes a diferentes cuerpos sin identificar, el corazón y la cabeza amputada de Bernice Worden en una bolsa de plástico, una colección de nueve máscaras de piel humana con el pelo intacto, de las cuales, cuatro colgaban en la pared que rodeaba la cama de Gein.
La única habitación de la casa que parecía normal era una sellada con tablones en la puerta y perfectamente ordenada... la de su madre. Desde que su madre muriera en 1945, doce años antes, la habitación había estado cerrada con clavos como un sepulcro. Ed explicó a la policía después de su detención que después de su fallecimiento, su madre se mantuvo en contacto con él durante más de un año, hablándole mientras se adormecía. Dijo que había sido en esa época cuando desarrolló su fascinación por la anatomía. Le fascinaban los reportajes sobre la operación de cambio de sexo y se planteó el convertirse él mismo en mujer.
ERZSÉBET BATHORY
El caso de este personaje resulta verdaderamente interesante para la historia del crimen en serie, partiendo en un principio del hecho que sea una de las pocas mujeres que haya asesinado de una manera tan cruel... a cerca de 650 niñas.
Además de una perversión sádica y sexual, la Condesa Elizabeth Báthory sentía especial atracción por la sangre, y no sólo se contentaba de beberla, como es habitual en los llamados asesinos vampíricos, sino que se bañaba en ella con el fin de impedir que su piel envejeciese al paso de los años.
Nace en 1560 en el seno de una de las más ricas familias húngaras.
Si bien pertenecía a la más ilustre y distinguida aristocracia, siendo su primo Primer Ministro de Hungría, y su tío Rey de Polonia, también existen antecedentes esotéricos entre los miembros de su familia, como pueden ser un tío adorador de Satán y otros familiares adeptos a la magia negra o la alquimia, entre los que se puede contar a la propia Báthory, ya que desde su infancia había sido influida por las enseñanzas de una nodriza que se dedicaba a las prácticas brujeriles.
Cuando sólo contaba con 15 años se casa con un noble, el conde Nadasdy, gran guerrero conocido como "El Héroe Negro", y se van a vivir en un solitario castillo en los Cárpatos.
El conde no tarda en ser reclamado en una batalla, por lo que se ve obligado a dejar sola a Elizabeth por un tiempo. Al cabo de muchos momentos en espera de su marido, ésta se aburre por el continuo aislamiento al que estaba sometida, y se fuga para mantener una relación con un joven noble al que las gentes del lugar denominaban "el vampiro" por su extraño aspecto. En breve regresa de nuevo al castillo y empieza a mantener relaciones lésbicas con dos de sus doncellas.
Desde ese momento, y para distraerse de las largas ausencias de su marido, comienza a interesarse sobremanera por el esoterismo, rodeándose de una siniestra corte de brujos, hechiceros y alquimistas. A medida que pasaban los años, la belleza que la caracterizaba se iba degradando, y preocupada por su aspecto físico pide consejo a la vieja nodriza. Ésta, le indica que el poder de la sangre y los sacrificios humanos daban muy buenos resultados en los hechizos de magia negra, y le aconseja que si se bañaba con sangre de doncella, podría conservar su belleza indefinidamente...
Además de una perversión sádica y sexual, la Condesa Elizabeth Báthory sentía especial atracción por la sangre, y no sólo se contentaba de beberla, como es habitual en los llamados asesinos vampíricos, sino que se bañaba en ella con el fin de impedir que su piel envejeciese al paso de los años.
Nace en 1560 en el seno de una de las más ricas familias húngaras.
Si bien pertenecía a la más ilustre y distinguida aristocracia, siendo su primo Primer Ministro de Hungría, y su tío Rey de Polonia, también existen antecedentes esotéricos entre los miembros de su familia, como pueden ser un tío adorador de Satán y otros familiares adeptos a la magia negra o la alquimia, entre los que se puede contar a la propia Báthory, ya que desde su infancia había sido influida por las enseñanzas de una nodriza que se dedicaba a las prácticas brujeriles.
Cuando sólo contaba con 15 años se casa con un noble, el conde Nadasdy, gran guerrero conocido como "El Héroe Negro", y se van a vivir en un solitario castillo en los Cárpatos.
El conde no tarda en ser reclamado en una batalla, por lo que se ve obligado a dejar sola a Elizabeth por un tiempo. Al cabo de muchos momentos en espera de su marido, ésta se aburre por el continuo aislamiento al que estaba sometida, y se fuga para mantener una relación con un joven noble al que las gentes del lugar denominaban "el vampiro" por su extraño aspecto. En breve regresa de nuevo al castillo y empieza a mantener relaciones lésbicas con dos de sus doncellas.
Desde ese momento, y para distraerse de las largas ausencias de su marido, comienza a interesarse sobremanera por el esoterismo, rodeándose de una siniestra corte de brujos, hechiceros y alquimistas. A medida que pasaban los años, la belleza que la caracterizaba se iba degradando, y preocupada por su aspecto físico pide consejo a la vieja nodriza. Ésta, le indica que el poder de la sangre y los sacrificios humanos daban muy buenos resultados en los hechizos de magia negra, y le aconseja que si se bañaba con sangre de doncella, podría conservar su belleza indefinidamente...
LUIS ALFREDO GARAVITO
Luis Alfredo Garavito nació en Génova, Quindío, el 25 de enero de 1957. Es el mayor de siete hermanos y durante su infancia vivió la falta de afecto y el maltrato físico por parte de su padre. Según su testimonio fue víctima de abuso sexual.
A sus 44 años, fue declarado por los investigadores y jueces como un asesino en serie. Hace años cuando fue capturado confesó ser el autor de la muerte de 140 niños en distintas regiones del país, pero a la fecha la Fiscalía lo investiga por el homicidio de 172 niños en su paso por 59 municipios del país.
En repetidas ocasiones, Garavito Cubillos se hacía pasar por vendedor ambulante, monje, indigente, discapacitado y representante de fundaciones ficticias en favor de niños y ancianos era conocido también como “Alfredo Salazar”, “El Loco”, “Tribilín”, “Conflicto” y “El Cura”.
Las víctimas de Garavito eran niños entre los 6 y los 16 años, de bajo estrato económico. Los abordaba en los parques infantiles, canchas deportivas, terminales de buses, plazas de mercado y barrios pobres. Según lo establecido les ofrecía dinero y los invitaba a caminar hasta cuando los menores se cansaban y eran atacados en sitios despoblados.
De acuerdo con la investigación, en esos lugares los cuerpos sin vida de los menores fueron encontrados degollados, mutilados y con señales de haber sido amarrados. En las residencias de su compañera y de una amiga en Pereira se encontraron objetos similares a los hallados en los sitios de los crímenes y publicaciones periodísticas en las cuales se reseñaba el estado de las investigaciones por desapariciones y homicidios de niños en el país.
A sus 44 años, fue declarado por los investigadores y jueces como un asesino en serie. Hace años cuando fue capturado confesó ser el autor de la muerte de 140 niños en distintas regiones del país, pero a la fecha la Fiscalía lo investiga por el homicidio de 172 niños en su paso por 59 municipios del país.
En repetidas ocasiones, Garavito Cubillos se hacía pasar por vendedor ambulante, monje, indigente, discapacitado y representante de fundaciones ficticias en favor de niños y ancianos era conocido también como “Alfredo Salazar”, “El Loco”, “Tribilín”, “Conflicto” y “El Cura”.
Las víctimas de Garavito eran niños entre los 6 y los 16 años, de bajo estrato económico. Los abordaba en los parques infantiles, canchas deportivas, terminales de buses, plazas de mercado y barrios pobres. Según lo establecido les ofrecía dinero y los invitaba a caminar hasta cuando los menores se cansaban y eran atacados en sitios despoblados.
De acuerdo con la investigación, en esos lugares los cuerpos sin vida de los menores fueron encontrados degollados, mutilados y con señales de haber sido amarrados. En las residencias de su compañera y de una amiga en Pereira se encontraron objetos similares a los hallados en los sitios de los crímenes y publicaciones periodísticas en las cuales se reseñaba el estado de las investigaciones por desapariciones y homicidios de niños en el país.
TED BUNDY
Nosotros los asesinos seriales somos sus hijos, somos sus esposos, estamos en todas partes.
Y habrá más de sus niños muertos mañana.'
Ted Bundy
Theodore Robert Cowell nació el 24 de Noviembre de 1946 su madre fue Louise Cowell y su padre un veterano de la fuerza aérea cuya identidad permaneció desconocida para Bundy durante toda su vida. Tras el nacimiento de Ted, Louise se va a vivir con sus papas y al paso del tiempo se le hace creer al niño que sus abuelos son sus padres y que su madre biológica es su hermana mayor, esto con el objetivo de proteger a la joven mujer de las acidas críticas de la sociedad en contra de las madres solteras. Esto a la postre resultó negativo para Bundy, ya que en algún momento de su vida se iba a enterar del engaño. A la edad de 4 años Bundy y su madre se mueven a Tacoma Washington a vivir con otros parientes y ahí la madre se enamora de un cocinero de la ciudad llamado Johnnie Culpepper Bundy y en Mayo de 1951 la pareja finalmente se casa. De ese modo Ted asume el apellido Bundy que conservaría toda la vida. El nuevo matrimonio fructificó con 4 hermanos mas para Bundy y a pesar de que Johnnie trataba de formar un lazo afectivo de padre a hijo con Ted incluyéndolo en todas las actividades familiares, este no se pudo solidificar nunca. Conforme pasaba el tiempo Ted se sentía más incómodo de la situación. Cada vez se fue haciendo más solitario y los expertos opinan que la incapacidad de Bundy para socializar y edificar lazos afectivos con las personas viene de estos primeros episodios familiares. Sin embargo esta condición psicológica es perfectamente típica de los asesinos seriales.
De acuerdo a los autores Michaud & Aynesworth la infancia de Bundy fue caracterizada por ser 'diferente' cosa que entre la niñez no es bien vista, teniendo que soportar toda clase de bromas de los más pesados compañeros de su escuela, la Woodrow Wilson High School donde si bien no era el más brillante alumno, pudo sacar muy bien sus calificaciones. En el libro 'Ted Bundy: Conversations with a Killer' establecen que el joven Bundy era incapaz de relacionarse satisfactoriamente con los demás. Que no entendía la necesidad de la gente por hacerse de amigos, de dejarse estimar. En realidad por alguna barrera psicológica ya infranqueable, no le interesaba formar lazos de amistad con otras personas. Actuaba como el resto, pero en el fondo dudaba.
En la educación media superior Bundy se convirtió en un sujeto dinámico y popular. Sus calificaciones eran buenas y todo marchaba más o menos bien, aunque no salía mucho con mujeres se le consideraba un sujeto atractivo y de excelentes maneras. Sus intereses giraban completamente en las actividades extracurriculares, como el esquiar y la política, que le provocaba apasionamientos y alguna vez en su vida estuvo involucrado en ella. De esta época se insiste que comenzó su carrera criminal empezando por lo pequeño: robos aquí y allá en tiendas, estafas de poca importancia, voyeurismo, etc. Pero para un criminal serial, por algo se empieza. Al paso del tiempo la personalidad de Bundy iría de ser tímido y reservado a ser un sujeto más dueño de sí mismo y dominante. A la par de esta evolución en su trato, irían in crescendo las manifestaciones sociópatas como el robo a casa habitación y el allanamiento de morada. Sabemos que un criminal serial es por definición manipulador y mentiroso. La gente de su círculo cercano jamás tuvo oportunidad de interpretar todas las señales que emitía Bundy.
Y habrá más de sus niños muertos mañana.'
Ted Bundy
Theodore Robert Cowell nació el 24 de Noviembre de 1946 su madre fue Louise Cowell y su padre un veterano de la fuerza aérea cuya identidad permaneció desconocida para Bundy durante toda su vida. Tras el nacimiento de Ted, Louise se va a vivir con sus papas y al paso del tiempo se le hace creer al niño que sus abuelos son sus padres y que su madre biológica es su hermana mayor, esto con el objetivo de proteger a la joven mujer de las acidas críticas de la sociedad en contra de las madres solteras. Esto a la postre resultó negativo para Bundy, ya que en algún momento de su vida se iba a enterar del engaño. A la edad de 4 años Bundy y su madre se mueven a Tacoma Washington a vivir con otros parientes y ahí la madre se enamora de un cocinero de la ciudad llamado Johnnie Culpepper Bundy y en Mayo de 1951 la pareja finalmente se casa. De ese modo Ted asume el apellido Bundy que conservaría toda la vida. El nuevo matrimonio fructificó con 4 hermanos mas para Bundy y a pesar de que Johnnie trataba de formar un lazo afectivo de padre a hijo con Ted incluyéndolo en todas las actividades familiares, este no se pudo solidificar nunca. Conforme pasaba el tiempo Ted se sentía más incómodo de la situación. Cada vez se fue haciendo más solitario y los expertos opinan que la incapacidad de Bundy para socializar y edificar lazos afectivos con las personas viene de estos primeros episodios familiares. Sin embargo esta condición psicológica es perfectamente típica de los asesinos seriales.
De acuerdo a los autores Michaud & Aynesworth la infancia de Bundy fue caracterizada por ser 'diferente' cosa que entre la niñez no es bien vista, teniendo que soportar toda clase de bromas de los más pesados compañeros de su escuela, la Woodrow Wilson High School donde si bien no era el más brillante alumno, pudo sacar muy bien sus calificaciones. En el libro 'Ted Bundy: Conversations with a Killer' establecen que el joven Bundy era incapaz de relacionarse satisfactoriamente con los demás. Que no entendía la necesidad de la gente por hacerse de amigos, de dejarse estimar. En realidad por alguna barrera psicológica ya infranqueable, no le interesaba formar lazos de amistad con otras personas. Actuaba como el resto, pero en el fondo dudaba.
En la educación media superior Bundy se convirtió en un sujeto dinámico y popular. Sus calificaciones eran buenas y todo marchaba más o menos bien, aunque no salía mucho con mujeres se le consideraba un sujeto atractivo y de excelentes maneras. Sus intereses giraban completamente en las actividades extracurriculares, como el esquiar y la política, que le provocaba apasionamientos y alguna vez en su vida estuvo involucrado en ella. De esta época se insiste que comenzó su carrera criminal empezando por lo pequeño: robos aquí y allá en tiendas, estafas de poca importancia, voyeurismo, etc. Pero para un criminal serial, por algo se empieza. Al paso del tiempo la personalidad de Bundy iría de ser tímido y reservado a ser un sujeto más dueño de sí mismo y dominante. A la par de esta evolución en su trato, irían in crescendo las manifestaciones sociópatas como el robo a casa habitación y el allanamiento de morada. Sabemos que un criminal serial es por definición manipulador y mentiroso. La gente de su círculo cercano jamás tuvo oportunidad de interpretar todas las señales que emitía Bundy.
ANDREI CHIKATILO
Andrei Romanovich Chikatilo nació el 16 de Octubre de 1936 en Yablochnoye, un pueblo de Ucrania en la entonces Unión Soviética. La niñez de Chikatilo fue muy difícil dado que su padre había caído prisionero de guerra durante la Segunda Guerra Mundial y su madre se había encargado ella sola de sacar adelante lo que quedaba de la familia, consistente en él y una hermana 7 años menor. En su infancia le tocó ver muy de cerca las escenas de la guerra, los resultados de constantes bombardeos alemanes dejaban una estela de heridos y cadáveres regados en algunas calles. Esos cuerpos asustaban al joven Chikatilo pero a la vez le provocaban sobresalto y curiosidad.
No está confirmada la real existencia de un hermano mayor de Andrei Chikatilo sin embargo, de chico y para controlarlo la mama le recordaba constantemente la historia de su hermano quien había muerto en la hambruna y unos vecinos se lo habían comido. Debido al proyecto Estalinista de colectivizar la actividad agrícola, mucha gente había sido trasladada y los efectos de mediano plazo fueron la quiebra de pueblos enteros y la hambruna. A pesar de que era probable que la gente más desesperada cometiera actos de canibalismo, no se puede confirmar si tal suerte le tocó al hermano de Chikatilo, pero de que era una buena historia de terror, sí que lo era. El chiquillo lo pensaba dos veces antes de abandonar el patio de la casa donde vivían. También se sabe que en su infancia Chikatilo orinaba la cama durante las noches, por lo cual era duramente reprimido y humillado por su madre.
Una vez en custodia policial, Chikatilo declaró que de niño tenía una fantasía recurrente que consistía en llevar el a soldados alemanes al bosque para ejecutarlos. Esa era una fantasía común de la niñez rusa durante la guerra. Pero la niñez de Chikatilo fue como con muchos otros asesinos seriales, de soledad y aislamiento. Los demás niños se burlaban de su extraña forma de ser así que desde niño comenzó a albergar fantasías de violencia y tortura contra sus semejantes. Su primera experiencia de tipo sexual fue entre los 10 y 15 años cuando un día se abalanzó contra una amiga de su hermana, ante el forcejeo de la muchacha para librarse de su abrazo, Chikatilo eyaculó. Esa asociación entre un acto de violencia y la eyaculación quedó fijamente plasmada en su mente para siempre.
Posteriormente se enroló en la armada para cumplir el servicio militar y de regreso quiso llevar una vida como la de cualquier otro. Se consiguió una novia, pero llegado el momento no pudo efectuar el coito y la muchacha se burló de él e incluso tuvo la ocurrencia de platicar el chisme por todos lados. Aquello era para arruinar la vida de cualquiera. Chikatilo fantaseaba encontrarse a solas con la susodicha y hacerla pedazos en castigo por esparcir la información acerca de su impotencia. Nunca pudo conseguir una erección, lo cual debió ser extremadamente frustrante. A pesar de ello y gracias a los arreglos de su hermana, se casó en 1963 y tuvo una hija y un hijo. Tras eyacular introdujo a mano el semen en la vagina de su mujer. Ni falta hace imaginar que aquel matrimonio era de lo más desabrido de esta vida, con una mujer muy al estilo de su madre, Chikatilo no hacía otra cosa que reforzar su apartado y enfermo mundo interior poblado de enojo y violencia que aumentaba conforme transcurría el tiempo.
No está confirmada la real existencia de un hermano mayor de Andrei Chikatilo sin embargo, de chico y para controlarlo la mama le recordaba constantemente la historia de su hermano quien había muerto en la hambruna y unos vecinos se lo habían comido. Debido al proyecto Estalinista de colectivizar la actividad agrícola, mucha gente había sido trasladada y los efectos de mediano plazo fueron la quiebra de pueblos enteros y la hambruna. A pesar de que era probable que la gente más desesperada cometiera actos de canibalismo, no se puede confirmar si tal suerte le tocó al hermano de Chikatilo, pero de que era una buena historia de terror, sí que lo era. El chiquillo lo pensaba dos veces antes de abandonar el patio de la casa donde vivían. También se sabe que en su infancia Chikatilo orinaba la cama durante las noches, por lo cual era duramente reprimido y humillado por su madre.
Una vez en custodia policial, Chikatilo declaró que de niño tenía una fantasía recurrente que consistía en llevar el a soldados alemanes al bosque para ejecutarlos. Esa era una fantasía común de la niñez rusa durante la guerra. Pero la niñez de Chikatilo fue como con muchos otros asesinos seriales, de soledad y aislamiento. Los demás niños se burlaban de su extraña forma de ser así que desde niño comenzó a albergar fantasías de violencia y tortura contra sus semejantes. Su primera experiencia de tipo sexual fue entre los 10 y 15 años cuando un día se abalanzó contra una amiga de su hermana, ante el forcejeo de la muchacha para librarse de su abrazo, Chikatilo eyaculó. Esa asociación entre un acto de violencia y la eyaculación quedó fijamente plasmada en su mente para siempre.
Posteriormente se enroló en la armada para cumplir el servicio militar y de regreso quiso llevar una vida como la de cualquier otro. Se consiguió una novia, pero llegado el momento no pudo efectuar el coito y la muchacha se burló de él e incluso tuvo la ocurrencia de platicar el chisme por todos lados. Aquello era para arruinar la vida de cualquiera. Chikatilo fantaseaba encontrarse a solas con la susodicha y hacerla pedazos en castigo por esparcir la información acerca de su impotencia. Nunca pudo conseguir una erección, lo cual debió ser extremadamente frustrante. A pesar de ello y gracias a los arreglos de su hermana, se casó en 1963 y tuvo una hija y un hijo. Tras eyacular introdujo a mano el semen en la vagina de su mujer. Ni falta hace imaginar que aquel matrimonio era de lo más desabrido de esta vida, con una mujer muy al estilo de su madre, Chikatilo no hacía otra cosa que reforzar su apartado y enfermo mundo interior poblado de enojo y violencia que aumentaba conforme transcurría el tiempo.
CHARLES MANSON
Su infancia transcurrió viajando de ciudad en ciudad hasta que a los 8 años su madre salió de prisión, donde cumplía una pena de cinco años por robo y agresión. Durante este tiempo convivió con su tía, una beata contraria a cualquier forma de placer, el cual consideraba pecaminoso.
Vivió con su madre (alcohólica) unos años hasta que por medio de un robo reunió el dinero necesario para "independizarse", a los 14 años fue detenido por primera vez y a partir de este momento su vida transcurrió entre fugas e ingresos en prisión, por lo cual se podría decir que su formación fue la que recibió en centros penitenciarios con otros presos.
Recién cumplida su mayoría de edad ya contaban entre sus hazañas el robo, una violación homosexual a un compañero, agresiones y varias fugas.
En 1953 con 19 años se casa con una enfermera de 17 años, habiendo tenido hasta ese momento solo relaciones homosexuales, tuvo su primer hijo pero el matrimonio fracaso y se divorciaron en 1958. Un año después se caso con una prostituta para que no declarara contra él y de ese matrimonio nació su segundo hijo.
Posteriormente ingreso en prisión donde comenzó a formarse en el esoterismo y paso a formar parte de la Iglesia de la Cienciología, todo esto desencadeno en que en 1967 cuando abandono la cárcel con 32 años llevase 17 años de su vida en la cárcel.
Esta formación esotérica le llevo a contar con un grupo de seguidores "su familia", según su filosofía solo los que les siguiesen se salvarían del apocalipsis.
Manson, que se autodenominaba Satán (además de Jesucristo, el Espíritu, el Anticristo y el Demonio), predicaba una curiosa doctrina, una mezcla de conceptos orientalistas y una reinterpretación de la Biblia.
Hippies, drogas, sexo libre, rock...Aquello era demasiado para un tipo que había aprendido a base de abusos a manipular a la gente y a ser temido por sus enemigos. El bueno de Manson fue bien acogido en la comunidad alternativa californiana. Tanto que se fue a vivir con una bibliotecaria -y ecologista radical- llamada Mary Brunner. Al poco tiempo, el tipo que posteriormente se autoproclamaría Anticristo, metió en casa a una chica de 16 años que encontró en la calle. Esto no molestó a Mary, que creía firmemente en los principios Hyppies, dando lugar a lo que sería el germen de "La Familia", institución creada a la medida de Manson.
Pronto comenzaron a recorrer toda la costa en un destartalado autobús escolar, predicando la palabra del ecologismo y el sexo libre, y captando la atención de numerosos seguidores. Eran ya una de las atracciones de Los Ángeles: ricos, famosos y celebridades recibían con los brazos abiertos a la comuna. Como Dennis Wilson, batería de los Beach Boys, que los alojó en su casa.
Y fue Wilson el que desencadenaría la ira de Manson. El chico de la playa, le había presentado a un productor musical -hijo de Doris Day- que vivía en una lujosa mansión en la calle Cielo Drive 10500, lugar al que acudiría Manson cada dos por tres para convencerle de que le produjera un disco. Ver cómo meses depués los Beach Boys sacaban el álbum 20/20 con la canción "Never learn not to love" -calco de un tema compuesto por Manson- tuvo que ser suficiente para que el líder de La Familia gritara "¡¡Cerdos!!".
Nunca pudo probarse que matará a nadie él mismo, pero ordenó varios asesinatos.
Vivió con su madre (alcohólica) unos años hasta que por medio de un robo reunió el dinero necesario para "independizarse", a los 14 años fue detenido por primera vez y a partir de este momento su vida transcurrió entre fugas e ingresos en prisión, por lo cual se podría decir que su formación fue la que recibió en centros penitenciarios con otros presos.
Recién cumplida su mayoría de edad ya contaban entre sus hazañas el robo, una violación homosexual a un compañero, agresiones y varias fugas.
En 1953 con 19 años se casa con una enfermera de 17 años, habiendo tenido hasta ese momento solo relaciones homosexuales, tuvo su primer hijo pero el matrimonio fracaso y se divorciaron en 1958. Un año después se caso con una prostituta para que no declarara contra él y de ese matrimonio nació su segundo hijo.
Posteriormente ingreso en prisión donde comenzó a formarse en el esoterismo y paso a formar parte de la Iglesia de la Cienciología, todo esto desencadeno en que en 1967 cuando abandono la cárcel con 32 años llevase 17 años de su vida en la cárcel.
Esta formación esotérica le llevo a contar con un grupo de seguidores "su familia", según su filosofía solo los que les siguiesen se salvarían del apocalipsis.
Manson, que se autodenominaba Satán (además de Jesucristo, el Espíritu, el Anticristo y el Demonio), predicaba una curiosa doctrina, una mezcla de conceptos orientalistas y una reinterpretación de la Biblia.
Hippies, drogas, sexo libre, rock...Aquello era demasiado para un tipo que había aprendido a base de abusos a manipular a la gente y a ser temido por sus enemigos. El bueno de Manson fue bien acogido en la comunidad alternativa californiana. Tanto que se fue a vivir con una bibliotecaria -y ecologista radical- llamada Mary Brunner. Al poco tiempo, el tipo que posteriormente se autoproclamaría Anticristo, metió en casa a una chica de 16 años que encontró en la calle. Esto no molestó a Mary, que creía firmemente en los principios Hyppies, dando lugar a lo que sería el germen de "La Familia", institución creada a la medida de Manson.
Pronto comenzaron a recorrer toda la costa en un destartalado autobús escolar, predicando la palabra del ecologismo y el sexo libre, y captando la atención de numerosos seguidores. Eran ya una de las atracciones de Los Ángeles: ricos, famosos y celebridades recibían con los brazos abiertos a la comuna. Como Dennis Wilson, batería de los Beach Boys, que los alojó en su casa.
Y fue Wilson el que desencadenaría la ira de Manson. El chico de la playa, le había presentado a un productor musical -hijo de Doris Day- que vivía en una lujosa mansión en la calle Cielo Drive 10500, lugar al que acudiría Manson cada dos por tres para convencerle de que le produjera un disco. Ver cómo meses depués los Beach Boys sacaban el álbum 20/20 con la canción "Never learn not to love" -calco de un tema compuesto por Manson- tuvo que ser suficiente para que el líder de La Familia gritara "¡¡Cerdos!!".
Nunca pudo probarse que matará a nadie él mismo, pero ordenó varios asesinatos.
JACK EL DESTRIPADOR
Ha pasado más de un siglo y todavía perdura el misterio. Cinco crímenes perpetuados en Whitechapel hacia 1888, que hoy, por el escaso número de víctimas hubiesen ocupado pocas líneas en los diarios, en su momento revolucionaron Londres y el mundo entero.
Durante cien años, investigadores, detectives, policías y muchos aficionados han tratado de establecer un perfil psicológico que ayudase a determinar la personalidad o el nombre del asesino, pero hasta ahora solo se han podido identificar los nombres de unos posibles sospechosos. Tal vez por ese motivo Jack el Destripador se ha convertido en el asesino en serie más conocido de la historia. Su nombre nos evoca una silueta entre la niebla del Londres Victoriano, una sombra con capa y sombrero negros que ataca a sus víctimas y desaparece para siempre de la escena del crimen... no en vano se han escrito sobre él cientos de libros, canciones, óperas y películas. Es la perfecta historia de suspense, el gran misterio sin resolver.
En el año 1888, Whitechapel era uno de los peores distritos de todo Londres. En las calles, hombres, mujeres y niños arrastraban una vida de pobreza y delincuencia en la que muchas veces el único alivio era el que podía ofrecerles una botella de alcohol barato. Los callejones oscuros desembocaban en bares mugrientos y burdeles miserables en los que algunas mujeres se ganaban la vida prostituyendo sus cuerpos por unos pocos peniques. Fue precisamente aquí, en el East End londinense, donde tuvo lugar el breve reinado de terror del temido descuartizador que firmaba sus crímenes como "Jack el Destripador".
Su primer crimen oficial, por así decirlo, el que reconocen todas las crónicas, tuvo lugar el 31 de agosto, aunque en su día se sospechó que por lo menos dos asesinatos anteriores menos publicitados habrían sido también obra suya.
Ese día estaba amaneciendo muy lentamente. Las calles todavía estaban oscuras, y a pesar del frío algún que otro paseante comenzaba a circular por el barrio. Uno de ellos distingue a lo lejos el cuerpo de una mujer tendido en el suelo que a primera vista parecía desmayada, pero cuando se acerca para tratar de ayudarla, ve que unas terribles heridas la habían casi decapitado.
Horrorizado, no deja pasar un minuto y avisa al primer policía que hacía su ronda por el barrio, quién acompañado de un médico distingue bajo la luz de una linterna que la muerte le había sido provocada por dos golpes con arma blanca que le habían seccionado la tráquea y el esófago. El cuerpo, todavía caliente en partes, indicaba que el momento del crimen no debía de haber sido de más de media hora antes de haber encontrado el cuerpo. Tras un examen más detallado en la sala de autopsias, descubren además que había sido brutalmente golpeada en la mandíbula inferior izquierda (posiblemente por una persona zurda), y que su abdomen había sido mutilado. Por lo demás, el asesino no había dejado otras pistas tras de sí, ni testigos, ni el arma homicida. Ninguno de los vecinos oyó nada.
La identificación de la víctima no fue tarea fácil, aunque unos días después su padre y su ex marido identifican el cuerpo de una mujer de 42 años, prostituta, llamada Anne Mare Nichols y conocida como Polly.
Polly había estado casada y tenía cinco niños, pero su adicción al alcohol había hecho que su matrimonio se rompiera. Desde entonces, sola, había vivido de sus pobres ingresos de prostituta.
El lunes 6 de agosto, varias semanas antes del primer crimen oficial del Destripador, Marta Tabram, una prostituta de 39 años, había sido hallada muerta con 39 puñaladas; y algunos meses antes, Emma Smith, una prostituta 45 años, había sido agredida salvajemente en la cabeza y le habían introducido un objeto en la vagina. Seguramente estos dos crímenes no tenían nada que ver con nuestro asesino, más que nada porque la firma del Destripador era más ritualista que los simples golpes y puñaladas, pero aún así, el terror ya se había apoderado de las almas de los habitantes del distrito londinense.
Durante cien años, investigadores, detectives, policías y muchos aficionados han tratado de establecer un perfil psicológico que ayudase a determinar la personalidad o el nombre del asesino, pero hasta ahora solo se han podido identificar los nombres de unos posibles sospechosos. Tal vez por ese motivo Jack el Destripador se ha convertido en el asesino en serie más conocido de la historia. Su nombre nos evoca una silueta entre la niebla del Londres Victoriano, una sombra con capa y sombrero negros que ataca a sus víctimas y desaparece para siempre de la escena del crimen... no en vano se han escrito sobre él cientos de libros, canciones, óperas y películas. Es la perfecta historia de suspense, el gran misterio sin resolver.
En el año 1888, Whitechapel era uno de los peores distritos de todo Londres. En las calles, hombres, mujeres y niños arrastraban una vida de pobreza y delincuencia en la que muchas veces el único alivio era el que podía ofrecerles una botella de alcohol barato. Los callejones oscuros desembocaban en bares mugrientos y burdeles miserables en los que algunas mujeres se ganaban la vida prostituyendo sus cuerpos por unos pocos peniques. Fue precisamente aquí, en el East End londinense, donde tuvo lugar el breve reinado de terror del temido descuartizador que firmaba sus crímenes como "Jack el Destripador".
Su primer crimen oficial, por así decirlo, el que reconocen todas las crónicas, tuvo lugar el 31 de agosto, aunque en su día se sospechó que por lo menos dos asesinatos anteriores menos publicitados habrían sido también obra suya.
Ese día estaba amaneciendo muy lentamente. Las calles todavía estaban oscuras, y a pesar del frío algún que otro paseante comenzaba a circular por el barrio. Uno de ellos distingue a lo lejos el cuerpo de una mujer tendido en el suelo que a primera vista parecía desmayada, pero cuando se acerca para tratar de ayudarla, ve que unas terribles heridas la habían casi decapitado.
Horrorizado, no deja pasar un minuto y avisa al primer policía que hacía su ronda por el barrio, quién acompañado de un médico distingue bajo la luz de una linterna que la muerte le había sido provocada por dos golpes con arma blanca que le habían seccionado la tráquea y el esófago. El cuerpo, todavía caliente en partes, indicaba que el momento del crimen no debía de haber sido de más de media hora antes de haber encontrado el cuerpo. Tras un examen más detallado en la sala de autopsias, descubren además que había sido brutalmente golpeada en la mandíbula inferior izquierda (posiblemente por una persona zurda), y que su abdomen había sido mutilado. Por lo demás, el asesino no había dejado otras pistas tras de sí, ni testigos, ni el arma homicida. Ninguno de los vecinos oyó nada.
La identificación de la víctima no fue tarea fácil, aunque unos días después su padre y su ex marido identifican el cuerpo de una mujer de 42 años, prostituta, llamada Anne Mare Nichols y conocida como Polly.
Polly había estado casada y tenía cinco niños, pero su adicción al alcohol había hecho que su matrimonio se rompiera. Desde entonces, sola, había vivido de sus pobres ingresos de prostituta.
El lunes 6 de agosto, varias semanas antes del primer crimen oficial del Destripador, Marta Tabram, una prostituta de 39 años, había sido hallada muerta con 39 puñaladas; y algunos meses antes, Emma Smith, una prostituta 45 años, había sido agredida salvajemente en la cabeza y le habían introducido un objeto en la vagina. Seguramente estos dos crímenes no tenían nada que ver con nuestro asesino, más que nada porque la firma del Destripador era más ritualista que los simples golpes y puñaladas, pero aún así, el terror ya se había apoderado de las almas de los habitantes del distrito londinense.
MARCEL PETIOT
Los psiquiatras que lo examinaron antes del juicio declararon que se trataba de un hombre en su sano juicio. Sin embargo, si nos detenemos a hacer un balance sobre cómo había sido su vida hasta entonces, nos encontramos con claros manifiestos de una mente desequilibrada desde su más tierna infancia.
Nació el 17 de enero de 1897. Su padre murió cuando él tenía tan sólo cinco, su madre murió tres años después, así que el niño fue confiado a los cuidados de varios tíos y tías. Tal vez por esta situación difícil su educación no fue como la de un niño normal ni mucho menos tuvo el afecto que éstos necesitan en esos años tan cruciales de vida.
De pequeño demostró una inteligencia considerable, pero al mismo tiempo revelaba ciertas tendencias sádicas que preocupaban a quienes le rodeaban: desde sumergir las patas de su gato en un cazo de agua hirviendo hasta asfixiar a este mismo animal con sus propias manos, o torturar a otros animales sacándoles los ojos para divertirse mirando como éstos se golpeaban contra las paredes una vez ciegos.
También tenía la manía de robar todo lo que le pasaba por las manos. A sus compañeros en clase, los medicamentos en el ejército cuando era soldado (para venderlos posteriormente en el mercado negro) e incluso los fondos municipales del alcalde de Villaneuve cuando se presentó a unas elecciones municipales.
Basta con observar su grave afición a la piromanía, su crueldad con los animales, esa ludopatía crónica, además de serios y continuos ataques depresivos, una avanzada paranoia y un crónico estado de melancolía... por no hablar de sus mentiras compulsivas y su actitud de desprecio hacia toda la sociedad o su sangre fría casi carente de sentimientos... sin duda ese carácter nos suena bastante desequilibrado. Sin duda refleja una personalidad muy conocida por todos nosotros: una personalidad psicopática.
Curiosamente, y como suele ser habitual en estos casos, todas estas peligrosas facetas de su vida no le impidieron salir adelante en la vida social. Su encanto personal le ayudó a ganar prestigio en el ámbito profesional como médico y en una carrera política que inició como concejal, aunque ese encanto ocultase un carácter carente de escrúpulos.
Nació el 17 de enero de 1897. Su padre murió cuando él tenía tan sólo cinco, su madre murió tres años después, así que el niño fue confiado a los cuidados de varios tíos y tías. Tal vez por esta situación difícil su educación no fue como la de un niño normal ni mucho menos tuvo el afecto que éstos necesitan en esos años tan cruciales de vida.
De pequeño demostró una inteligencia considerable, pero al mismo tiempo revelaba ciertas tendencias sádicas que preocupaban a quienes le rodeaban: desde sumergir las patas de su gato en un cazo de agua hirviendo hasta asfixiar a este mismo animal con sus propias manos, o torturar a otros animales sacándoles los ojos para divertirse mirando como éstos se golpeaban contra las paredes una vez ciegos.
También tenía la manía de robar todo lo que le pasaba por las manos. A sus compañeros en clase, los medicamentos en el ejército cuando era soldado (para venderlos posteriormente en el mercado negro) e incluso los fondos municipales del alcalde de Villaneuve cuando se presentó a unas elecciones municipales.
Basta con observar su grave afición a la piromanía, su crueldad con los animales, esa ludopatía crónica, además de serios y continuos ataques depresivos, una avanzada paranoia y un crónico estado de melancolía... por no hablar de sus mentiras compulsivas y su actitud de desprecio hacia toda la sociedad o su sangre fría casi carente de sentimientos... sin duda ese carácter nos suena bastante desequilibrado. Sin duda refleja una personalidad muy conocida por todos nosotros: una personalidad psicopática.
Curiosamente, y como suele ser habitual en estos casos, todas estas peligrosas facetas de su vida no le impidieron salir adelante en la vida social. Su encanto personal le ayudó a ganar prestigio en el ámbito profesional como médico y en una carrera política que inició como concejal, aunque ese encanto ocultase un carácter carente de escrúpulos.
ARTHUR SHAWCROSS
Un asesino en serie suele exagerar el número de sus víctimas, o del mismo modo, confesar actos que no cometió. En el caso de Shawcross, éste fingía canibalismo y necrofilia con el fin de poder alegar locura, lo cual le haría irresponsable de sus actos.
Encarna de modo perfecto el talento de manipulación propio de los asesinos en serie, y también las fallas del sistema, pues fue liberado por la justicia después del asesinato de dos niños en 1972.
Afirmó haber sido víctima de abusos sexuales durante su adolescencia, que sufría psicosis heredadas por las atrocidades que había vivido en la guerra de Vietnam, y que esta psicosis adquirida le obligaba a cometer actos criminales; contó a los psiquiatras en una entrevista cómo había matado a una mujer y a una adolescente vietnamitas: "En un valle no lejos de Kontum, yo veo a una mujer y le disparo. No quedó muerta del todo y la até a un árbol. De una de las chozas sale una muchacha y la llevo para atarla con la otra. Son el enemigo, por lo que le corto el cuello a la primera."
"Como los vietnamitas son supersticiosos, clavo su cabeza en un poste, para que no vengan más. Luego corté la carne de la pierna de aquella mujer por el muslo hasta la rodilla, como un jamón, y lo asé en el fuego. No olía muy bien, pero cuando estuvo bien asada me puse a comerla..."
Como Jack el Destripador, atacaba a prostitutas a las que mataba sin remordimientos, haciendo reinar el terror en la ciudad de Rochester y sus alrededores. Shawcross estrangulaba a sus víctimas y dejaba sus cuerpos a orillas del río Genesse, o escondidas entre los matorrales.
En dos ocasiones hizo dudar a la policía si se trataba de un único asesino o dos, puesto que en dos ocasiones, las víctimas no correspondían con el perfil de las demás desafortunadas.
La falta de indicios da lugar a los rumores más singulares en un tema que no abandona las primeras páginas de los periódicos. Según algunos, trata de vengarse después de que una prostituta le hubiese transmitido el virus del sida. Otros creen que se trata de un policía que patrulla por las zonas de prostitución, y otros que simplemente mata a mujeres que le recuerdan algún trauma con alguna mujer o su propia madre. Otros, que pertenece a una secta de tipo protestante y quiere condenar a esas mujeres de la calle.
Las prostitutas empiezan incluso a colaborar con la policía para tratar de atrapar al asesino, pero ninguna pista da resultado. Finalmente las autoridades locales recurren al FBI, quienes establecen el perfil psicológico del asesino, y envían a un agente especial llamado Gregg McCrary, quien ordena investigar en profundidad los lugares en dónde se han hallado los cadáveres y los alrededores al río Genesse, intuyendo que el criminal podría volver allí para revivir la excitación de sus crímenes.
Encarna de modo perfecto el talento de manipulación propio de los asesinos en serie, y también las fallas del sistema, pues fue liberado por la justicia después del asesinato de dos niños en 1972.
Afirmó haber sido víctima de abusos sexuales durante su adolescencia, que sufría psicosis heredadas por las atrocidades que había vivido en la guerra de Vietnam, y que esta psicosis adquirida le obligaba a cometer actos criminales; contó a los psiquiatras en una entrevista cómo había matado a una mujer y a una adolescente vietnamitas: "En un valle no lejos de Kontum, yo veo a una mujer y le disparo. No quedó muerta del todo y la até a un árbol. De una de las chozas sale una muchacha y la llevo para atarla con la otra. Son el enemigo, por lo que le corto el cuello a la primera."
"Como los vietnamitas son supersticiosos, clavo su cabeza en un poste, para que no vengan más. Luego corté la carne de la pierna de aquella mujer por el muslo hasta la rodilla, como un jamón, y lo asé en el fuego. No olía muy bien, pero cuando estuvo bien asada me puse a comerla..."
Como Jack el Destripador, atacaba a prostitutas a las que mataba sin remordimientos, haciendo reinar el terror en la ciudad de Rochester y sus alrededores. Shawcross estrangulaba a sus víctimas y dejaba sus cuerpos a orillas del río Genesse, o escondidas entre los matorrales.
En dos ocasiones hizo dudar a la policía si se trataba de un único asesino o dos, puesto que en dos ocasiones, las víctimas no correspondían con el perfil de las demás desafortunadas.
La falta de indicios da lugar a los rumores más singulares en un tema que no abandona las primeras páginas de los periódicos. Según algunos, trata de vengarse después de que una prostituta le hubiese transmitido el virus del sida. Otros creen que se trata de un policía que patrulla por las zonas de prostitución, y otros que simplemente mata a mujeres que le recuerdan algún trauma con alguna mujer o su propia madre. Otros, que pertenece a una secta de tipo protestante y quiere condenar a esas mujeres de la calle.
Las prostitutas empiezan incluso a colaborar con la policía para tratar de atrapar al asesino, pero ninguna pista da resultado. Finalmente las autoridades locales recurren al FBI, quienes establecen el perfil psicológico del asesino, y envían a un agente especial llamado Gregg McCrary, quien ordena investigar en profundidad los lugares en dónde se han hallado los cadáveres y los alrededores al río Genesse, intuyendo que el criminal podría volver allí para revivir la excitación de sus crímenes.
JOHN GEORGE HAIGH
49. JOHN GEORGE HAIGH.
En algunos casos, los sueños son capaces de condicionar un comportamiento hasta alcanzar extremos inimaginables, sobre todo si la persona afectada tiene una mente fría y un corazón débil, como puede ser el caso de un criminal. John siempre había tenido un sueño que lo venía obsesionando desde... Ver mas
En algunos casos, los sueños son capaces de condicionar un comportamiento hasta alcanzar extremos inimaginables, sobre todo si la persona afectada tiene una mente fría y un corazón débil, como puede ser el caso de un criminal.
John siempre había tenido un sueño que lo venía obsesionando desde muy pequeño, una pesadilla muy extraña: se veía en un campo repleto de crucifijos que lentamente se iban transformando a su paso en árboles sin hojas con largas ramas por las que caían gotas de rocío. Al aproximarse a los árboles, podía ver como las gotas que cubrían las ramas no eran agua... eran sangre. Los árboles comenzaban a retorcerse como si sufrieran un tormentoso daño y la sangre brotaba de los troncos, mientras una silueta borrosa que portaba una copa recogía el líquido rojo. Luego, una vez llena se le acercaba y se la ofrecía ordenándole beberla.
John se sentía completamente indefenso ante la situación. No era capaz de mover un solo músculo y quería librarse de la pesadilla. El ser, le dice que la única manera de librarse de él, es matar, para así saciar su verdadera sed.
La cruel pesadilla le estaba destrozando los nervios y cada vez se sentía menos dueño de sus actos. El quería ser libre, no volver a soñar... y terminó asumiendo que para hacerse libre tenía que hacerla real.
John siempre había tenido un sueño que lo venía obsesionando desde muy pequeño, una pesadilla muy extraña: se veía en un campo repleto de crucifijos que lentamente se iban transformando a su paso en árboles sin hojas con largas ramas por las que caían gotas de rocío. Al aproximarse a los árboles, podía ver como las gotas que cubrían las ramas no eran agua... eran sangre. Los árboles comenzaban a retorcerse como si sufrieran un tormentoso daño y la sangre brotaba de los troncos, mientras una silueta borrosa que portaba una copa recogía el líquido rojo. Luego, una vez llena se le acercaba y se la ofrecía ordenándole beberla.
John se sentía completamente indefenso ante la situación. No era capaz de mover un solo músculo y quería librarse de la pesadilla. El ser, le dice que la única manera de librarse de él, es matar, para así saciar su verdadera sed.
La cruel pesadilla le estaba destrozando los nervios y cada vez se sentía menos dueño de sus actos. El quería ser libre, no volver a soñar... y terminó asumiendo que para hacerse libre tenía que hacerla real.
ROBERT HANSEN
Robert Christian Hansen nació el 15 de Febrero de 1939 en Estherville, Iowa. Hijo de un cocinero de origen Danés, paso una infancia muy difícil al lado de su padre que lo obligaba a trabajar largas horas en el negocio de la familia. Al llegar a la adolescencia el severo acné que padeció se sumó al marcado tartamudeo que tenía. Era el perfecto objeto de las burlas y los abusadores de siempre en la escuela. Quienes se acuerdan de él, lo veían como un sujeto solitario que jamás socializaba con nadie. A pesar de haber nacido zurdo, sus padres lo obligaron siempre a usar la mano derecha, imposición que incrementaba la presión y el estrés en que vivía.
A pesar de todo lo anterior, en 1960 se casó con una muchacha pero su matrimonio no duró mucho. El 7 de Diciembre del mismo año con el objetivo de vengarse por rencillas contra los pobladores de Pocahontas, fueran estas reales o imaginarios, Hansen obligó a un empleado del negocio de la familia a que lo ayudara a incendiar un garaje del autobús de la escuela. Para su desgracia este joven de 16 años tuvo la entereza suficiente de delatarlo. Fue sentenciado a una pena de 3 años en prisión, a los 6 meses su esposa tramitó el divorcio y para su fortuna le fue otorgada la libertad condicional cumplidos 20 meses.
Nuevamente, a pesar de todo lo anterior, no pasaron muchos meses para que Robert Hansen se casara otra vez. De acuerdo a los estudios psicológicos que le fueron practicados, Hansen era de personalidad infantil y obsesiva. Y después de lo del incendio ahora había adquirido la afición por robar. Carecía de necesidades, así que lo hacía por la emoción momentánea del hurto. A pesar de que fue descubierto en sus pillerías, nadie hizo olas y no se levantaron cargos.
En 1967 los Hansen decidieron comenzar una nueva vida y se movieron a Alaska, a la ciudad de Anchorage. Ahí de nuevo continuaron los problemas de Robert, esta vez fue acusado de robar una sierra eléctrica. Fue sentenciado a 5 años de prisión y nuevamente fue estudiado por doctores, quienes diagnosticaron que Hansen padecía de trastorno bipolar, y que requería terapia a base de litio para controlar sus violentos cambios de humor. A pesar de que era ya considerado un peligro para la sociedad jamás se hizo nada por obligarlo judicialmente a seguir el tratamiento.
Una vez fuera de la cárcel, prosiguió su vida matrimonial. Ya era padre de dos hijos cuando ideó una curiosa manera de hacerse con más dinero. Simuló el robo de una serie de objetos de valor de su casa, los cuales escondió en un área apartada y secreta de la misma. El seguro le reembolsó $13,000 dólares con los cuales instaló un negocio de comida. Entre los objetos reportados como robados se encontraban varios trofeos de cacería. Actividad en la que Hansen era una celebridad de la localidad. Poseía un numeroso arsenal de rifles y era muy comentada la hazaña en la cual con un arco y flecha dio caza a una cabra salvaje, habitante usual de los parajes boscosos de Alaska. La cacería le daba un alto status dentro de la sociedad que antaño cuando adolescente careció completamente. De hecho la gente consideraba a Robert Hansen como uno de los pilares de su comunidad. Era apreciado y respetado.
La gente ignoraba o negaba admitir que este singular hombre bajito y fervoroso padre de familia era en realidad un peligroso sociópata. Criminal consumado que había robado, incendiado y defraudado una aseguradora. Peor aún, era un asesino de bailarinas y prostitutas, pero ese delito permanecería oculto por algún tiempo.
Como consecuencia del boom petrolero de Anchorage, muchachas jóvenes y guapas pronto fueron seducidas con la posibilidad de hacer grandes ganancias bailando y prostituyendose en el área. El vehículo de estas actividades de alto riesgo fueron la aparición y funcionamiento de numerosos clubes tales como el Wild Cherry Bar, Arctic Fox y el Booby Trap entre otros, que actualmente han desaparecido. Dichos lugares conseguían ganancias mensuales por encima de los $50,000 dólares. Alrededor de estos lugares aparecieron puestos de revistas con toda la pornografía imaginable en aquella época. Esos y otros negocios de dudosa procedencia. Los robos, fraudes y riñas proliferaron notablemente y fue en este sórdido ambiente donde Robert Hansen acechaba a sus víctimas
A pesar de todo lo anterior, en 1960 se casó con una muchacha pero su matrimonio no duró mucho. El 7 de Diciembre del mismo año con el objetivo de vengarse por rencillas contra los pobladores de Pocahontas, fueran estas reales o imaginarios, Hansen obligó a un empleado del negocio de la familia a que lo ayudara a incendiar un garaje del autobús de la escuela. Para su desgracia este joven de 16 años tuvo la entereza suficiente de delatarlo. Fue sentenciado a una pena de 3 años en prisión, a los 6 meses su esposa tramitó el divorcio y para su fortuna le fue otorgada la libertad condicional cumplidos 20 meses.
Nuevamente, a pesar de todo lo anterior, no pasaron muchos meses para que Robert Hansen se casara otra vez. De acuerdo a los estudios psicológicos que le fueron practicados, Hansen era de personalidad infantil y obsesiva. Y después de lo del incendio ahora había adquirido la afición por robar. Carecía de necesidades, así que lo hacía por la emoción momentánea del hurto. A pesar de que fue descubierto en sus pillerías, nadie hizo olas y no se levantaron cargos.
En 1967 los Hansen decidieron comenzar una nueva vida y se movieron a Alaska, a la ciudad de Anchorage. Ahí de nuevo continuaron los problemas de Robert, esta vez fue acusado de robar una sierra eléctrica. Fue sentenciado a 5 años de prisión y nuevamente fue estudiado por doctores, quienes diagnosticaron que Hansen padecía de trastorno bipolar, y que requería terapia a base de litio para controlar sus violentos cambios de humor. A pesar de que era ya considerado un peligro para la sociedad jamás se hizo nada por obligarlo judicialmente a seguir el tratamiento.
Una vez fuera de la cárcel, prosiguió su vida matrimonial. Ya era padre de dos hijos cuando ideó una curiosa manera de hacerse con más dinero. Simuló el robo de una serie de objetos de valor de su casa, los cuales escondió en un área apartada y secreta de la misma. El seguro le reembolsó $13,000 dólares con los cuales instaló un negocio de comida. Entre los objetos reportados como robados se encontraban varios trofeos de cacería. Actividad en la que Hansen era una celebridad de la localidad. Poseía un numeroso arsenal de rifles y era muy comentada la hazaña en la cual con un arco y flecha dio caza a una cabra salvaje, habitante usual de los parajes boscosos de Alaska. La cacería le daba un alto status dentro de la sociedad que antaño cuando adolescente careció completamente. De hecho la gente consideraba a Robert Hansen como uno de los pilares de su comunidad. Era apreciado y respetado.
La gente ignoraba o negaba admitir que este singular hombre bajito y fervoroso padre de familia era en realidad un peligroso sociópata. Criminal consumado que había robado, incendiado y defraudado una aseguradora. Peor aún, era un asesino de bailarinas y prostitutas, pero ese delito permanecería oculto por algún tiempo.
Como consecuencia del boom petrolero de Anchorage, muchachas jóvenes y guapas pronto fueron seducidas con la posibilidad de hacer grandes ganancias bailando y prostituyendose en el área. El vehículo de estas actividades de alto riesgo fueron la aparición y funcionamiento de numerosos clubes tales como el Wild Cherry Bar, Arctic Fox y el Booby Trap entre otros, que actualmente han desaparecido. Dichos lugares conseguían ganancias mensuales por encima de los $50,000 dólares. Alrededor de estos lugares aparecieron puestos de revistas con toda la pornografía imaginable en aquella época. Esos y otros negocios de dudosa procedencia. Los robos, fraudes y riñas proliferaron notablemente y fue en este sórdido ambiente donde Robert Hansen acechaba a sus víctimas
ARMIN MEIWES
Armin Meiwes era un chico normal en la escuela, algo retraído y apartado de sus compañeros. En su familia vivió las sucesivas separaciones de su madre y al final de su pubertad vivía sólo con ella, sometido a una estricta disciplina. Estos antecedentes no son nuevos en la historia de los criminales más famosos del mundo. En su juventud, el caníbal presenció escenas de matanza que podrían haber influenciado su estado psicológico. Matanzas de animales en las que él participaba para darse después el gran banquete.
A la edad de 18 años, Armin se muda con su madre a la enorme casa que la familia poseía a las afueras de Rotemburgo. La casa tenía 44 habitaciones y los amigos de Armin la llamaban la casa de los espíritus. Posteriormente ingresó en el ejército donde destacó por su disciplina. Apoyaba a los subalternos y se llevaba bien con ellos. Se llevaba a su madre con las excursiones de su brigada y pasaba la noche con ella en habitación separada. Tras su servicio en el ejército, trabajó como técnico de computadoras en un centro informático de Kassel. En su trabajo también se le consideraba diligente y eficiente. Entre sus aficiones estaban la lectura de libros de caníbales, muertes y asesinos en serie. Además coleccionaba partes del cuerpo de muñecas que coleccionaba en un cofre para ocultarlas de su madre.
La madre falleció en 1999 en la casa de Rotemburgo. Tras su muerte, Armin se quedó solo en el mundo y los únicos lazos familiares y sentimentales que mantenía desaparecieron de su vida. A partir de este punto, Meiwes inició su carrera criminal por internet. Fotos de crímenes, accidentes, cuerpos abiertos y otras muchas fantasías violentas componen el archivo fotográfico de su computadora. Foros como "Gourmet" o "Caníbal –Café" le proporcionan la plataforma ideal para contar y compartir sus fantasías más profundas. Comienza la nueva doble vida de Armin como el Dr. Jekill y Mr. Hyde. El Mr. Hyde sigue siendo el buen trabajador, buen vecino y ciudadano que busca la mujer de su vida pero el Dr. Jekill aparece en escena por las noches con sus fantasías caníbales.
Así comenzaron sus primeros contactos. Primero un cocinero ofreció a dos de sus ayudantes para ser degustados. Armin habría tenido la oportunidad de matarlo y devorarlo. Sin embargo, ante las dudas de la víctima, lo dejó marchar. El banquete sólo tenía sentido si la víctima también estaba de acuerdo.
En el chat, conoció a Bernd Brandes, un ingeniero de Berlín. Bernd se declaraba bisexual y su comportamiento sexual no era lo que se puede llamar "normal". Violencia y tortura formaban parte de su rituales sexuales del día a día. Se citaron primero para un fin de semana donde pusieron a prueba sus instintos caníbales. Tras la despedida en la estación, Brandes lo pensó mejor y llamó a Meiwes para que lo recogiese. Quería probar otra vez.
Tras varias horas de conversación, Brandes quiso que el Caníbal le amputase el pene. "Córtalo de una vez", dijo la víctima. Con gran cantidad de alcohol y medicamentos, ya no sentía dolor. Por fin Bernd pudo cumplir su sueño, comerse sus propios genitales. Meiwes cortó el pene en dos trozos y los puso en la sartén aderezándolos con pimienta, sal y ajo.
En cuanto a los motivos que llevaron a la víctima a ofrecerse, Armin manifestó que no entendía el sentimiento de felicidad que Bernd experimentaba. Meiwes asesinó posteriormente a su víctima en la mesa de descuartizar y grabó todo en cámara de vídeo. Descuartizó el cuerpo y conservó la carne. Después de dos días, Armin vio cumplido su deseo de comer carne humana. Según las declaraciones a la policía, la carne humana tiene un sabor parecido a la carne de cerdo.
A la edad de 18 años, Armin se muda con su madre a la enorme casa que la familia poseía a las afueras de Rotemburgo. La casa tenía 44 habitaciones y los amigos de Armin la llamaban la casa de los espíritus. Posteriormente ingresó en el ejército donde destacó por su disciplina. Apoyaba a los subalternos y se llevaba bien con ellos. Se llevaba a su madre con las excursiones de su brigada y pasaba la noche con ella en habitación separada. Tras su servicio en el ejército, trabajó como técnico de computadoras en un centro informático de Kassel. En su trabajo también se le consideraba diligente y eficiente. Entre sus aficiones estaban la lectura de libros de caníbales, muertes y asesinos en serie. Además coleccionaba partes del cuerpo de muñecas que coleccionaba en un cofre para ocultarlas de su madre.
La madre falleció en 1999 en la casa de Rotemburgo. Tras su muerte, Armin se quedó solo en el mundo y los únicos lazos familiares y sentimentales que mantenía desaparecieron de su vida. A partir de este punto, Meiwes inició su carrera criminal por internet. Fotos de crímenes, accidentes, cuerpos abiertos y otras muchas fantasías violentas componen el archivo fotográfico de su computadora. Foros como "Gourmet" o "Caníbal –Café" le proporcionan la plataforma ideal para contar y compartir sus fantasías más profundas. Comienza la nueva doble vida de Armin como el Dr. Jekill y Mr. Hyde. El Mr. Hyde sigue siendo el buen trabajador, buen vecino y ciudadano que busca la mujer de su vida pero el Dr. Jekill aparece en escena por las noches con sus fantasías caníbales.
Así comenzaron sus primeros contactos. Primero un cocinero ofreció a dos de sus ayudantes para ser degustados. Armin habría tenido la oportunidad de matarlo y devorarlo. Sin embargo, ante las dudas de la víctima, lo dejó marchar. El banquete sólo tenía sentido si la víctima también estaba de acuerdo.
En el chat, conoció a Bernd Brandes, un ingeniero de Berlín. Bernd se declaraba bisexual y su comportamiento sexual no era lo que se puede llamar "normal". Violencia y tortura formaban parte de su rituales sexuales del día a día. Se citaron primero para un fin de semana donde pusieron a prueba sus instintos caníbales. Tras la despedida en la estación, Brandes lo pensó mejor y llamó a Meiwes para que lo recogiese. Quería probar otra vez.
Tras varias horas de conversación, Brandes quiso que el Caníbal le amputase el pene. "Córtalo de una vez", dijo la víctima. Con gran cantidad de alcohol y medicamentos, ya no sentía dolor. Por fin Bernd pudo cumplir su sueño, comerse sus propios genitales. Meiwes cortó el pene en dos trozos y los puso en la sartén aderezándolos con pimienta, sal y ajo.
En cuanto a los motivos que llevaron a la víctima a ofrecerse, Armin manifestó que no entendía el sentimiento de felicidad que Bernd experimentaba. Meiwes asesinó posteriormente a su víctima en la mesa de descuartizar y grabó todo en cámara de vídeo. Descuartizó el cuerpo y conservó la carne. Después de dos días, Armin vio cumplido su deseo de comer carne humana. Según las declaraciones a la policía, la carne humana tiene un sabor parecido a la carne de cerdo.
RICKY KASSO
Relacionado con un culto satánico tras asesinar a un compañero por no adorar a Satán.
Ricky Kasso era un joven de 17 años de edad que residía en Northport, Long Island. Lo apodaban "el Rey del Ácido" por su afición a las drogas alucinógenas.
En 1984, la policía de Northport recibe una llamada telefónica declarando que había sido hallado un cuerpo semi enterrado en un hoyo en el pequeño bosque de Aztakea. Un grupo de agentes se dirigieron al lugar con la intención de comprobar la veracidad de la llamada, y efectivamente, en los bosques se encontró el cuerpo de Gary Lauwers.
Por el elevado grado de descomposición del cadáver se estimó que debía llevar allí más de dos semanas. El hombre había sido apuñalado treinta y dos veces, de las cuales unas veintidós en la cara. Debido al mal estado del cuerpo, los agentes no podían asegurar el número exacto de heridas, pudiendo haber sido un total de cortes mayor al precisado.
La policía enfocó su investigación sobre dos jóvenes bastante conocidos en el mundillo policial por ser habituales consumidores de drogas y cometer actos de vandalismo propios de adolescentes. Se trataba de Ricky Kasso y su amigo James Troiano.
Los dos habían dejado la escuela secundaria, y ahora se dedicaban a vagar por las calles. Eran dos personajes curiosos, Troiano tenía el record de arrestos por robo, mientras que Kasso lo tenía por reunir los cargos más extraños. Su arresto más reciente había sido por haber profanado una tumba del siglo 19, en dónde robó un cráneo y una mano. Según sus declaraciones, los pensaba utilizar en un rito satánico.
Poco después fueron puestos bajo custodia, y en un interrogatorio casi de rutina ambos confesaron a los agentes haber cometido aquel asesinato. Decían que se habían unido a un grupo satánico local conocido como el "los Caballeros del Círculo Negro" que tenía alrededor de veinte miembros y era conocido por sus sacrificios animales a su dios Satán.
En un principio se asoció el crimen como parte de un rito satánico, en el cual habrían extraído los ojos de la víctima. Kasso declaró que estaba en el bosque con Lauwers y dos amigos, Quiñones y Troiano.
Dice que comenzó a sentirse extremamente agresivo, entonces comenzó a golpear a Lauwers hasta perder el control. Luego reconoce haber sacado un cuchillo del bolsillo y haberlo apuñalado gritando una y otra vez "Di que amas a Satanás". Como el agredido no contestaba más que "No, yo solo amo a mi madre", siguió ensañándose con él preso de la rabia hasta que lo mató.
Cuando vio lo que había hecho confiesa haber sentido miedo, pero en ese preciso momento dice haber escuchado el graznido de un cuervo que, en su mente, identificó como una señal de Satanás diciéndole que el crimen había sido en su honor y un hecho positivo para él.
Ricky Kasso era un joven de 17 años de edad que residía en Northport, Long Island. Lo apodaban "el Rey del Ácido" por su afición a las drogas alucinógenas.
En 1984, la policía de Northport recibe una llamada telefónica declarando que había sido hallado un cuerpo semi enterrado en un hoyo en el pequeño bosque de Aztakea. Un grupo de agentes se dirigieron al lugar con la intención de comprobar la veracidad de la llamada, y efectivamente, en los bosques se encontró el cuerpo de Gary Lauwers.
Por el elevado grado de descomposición del cadáver se estimó que debía llevar allí más de dos semanas. El hombre había sido apuñalado treinta y dos veces, de las cuales unas veintidós en la cara. Debido al mal estado del cuerpo, los agentes no podían asegurar el número exacto de heridas, pudiendo haber sido un total de cortes mayor al precisado.
La policía enfocó su investigación sobre dos jóvenes bastante conocidos en el mundillo policial por ser habituales consumidores de drogas y cometer actos de vandalismo propios de adolescentes. Se trataba de Ricky Kasso y su amigo James Troiano.
Los dos habían dejado la escuela secundaria, y ahora se dedicaban a vagar por las calles. Eran dos personajes curiosos, Troiano tenía el record de arrestos por robo, mientras que Kasso lo tenía por reunir los cargos más extraños. Su arresto más reciente había sido por haber profanado una tumba del siglo 19, en dónde robó un cráneo y una mano. Según sus declaraciones, los pensaba utilizar en un rito satánico.
Poco después fueron puestos bajo custodia, y en un interrogatorio casi de rutina ambos confesaron a los agentes haber cometido aquel asesinato. Decían que se habían unido a un grupo satánico local conocido como el "los Caballeros del Círculo Negro" que tenía alrededor de veinte miembros y era conocido por sus sacrificios animales a su dios Satán.
En un principio se asoció el crimen como parte de un rito satánico, en el cual habrían extraído los ojos de la víctima. Kasso declaró que estaba en el bosque con Lauwers y dos amigos, Quiñones y Troiano.
Dice que comenzó a sentirse extremamente agresivo, entonces comenzó a golpear a Lauwers hasta perder el control. Luego reconoce haber sacado un cuchillo del bolsillo y haberlo apuñalado gritando una y otra vez "Di que amas a Satanás". Como el agredido no contestaba más que "No, yo solo amo a mi madre", siguió ensañándose con él preso de la rabia hasta que lo mató.
Cuando vio lo que había hecho confiesa haber sentido miedo, pero en ese preciso momento dice haber escuchado el graznido de un cuervo que, en su mente, identificó como una señal de Satanás diciéndole que el crimen había sido en su honor y un hecho positivo para él.
KATHRYN SCHOONOVER
Kathryn Schoonover pudo haberse convertido en la mayor asesina en serie de nuestros días, sobrepasando con creces el "récord" del soviético Andrei Chikatilo, pues preparaba antes de ser detenida, un asesinato masivo con cianuro que podría haber llenado su lista negra con más de un centenar de víctimas...
Aunque pueda parecer increíble y casi de ficción, esta mujer de 50 años fue arrestada el pasado domingo 23 de agosto de 1998 en Marina del Rey, California, tras ser encontrado en su poder más de cien bolsitas de plástico llenas de cianuro. Schoonover, preparaba las bolsas como si fuesen muestras de productos vitamínicos dentro de folletos publicitarios. Cada una de las bolsas iba incorporada a un folleto que promocionaba supuestas sustancias nutritivas, compuestos para mejorar el rendimiento atlético y para adelgazar (y tanto...). El incidente de esta tranquila localidad, situada a unos dieciséis kilómetros de Los Ángeles, obligó a poner en estado de alerta a todas las oficinas de la región. La terrible mujer pensaba enviar los sobres con cianuro por correo a destinatarios de todo el país, elegidos al parecer, al azar... Fue descubierta accidentalmente por un usuario de la oficina postal, al que llamó la atención ver cómo la sospechosa llenaba las bolsitas plásticas con polvos de un recipiente marcado con los típicos signos de peligro que identifican a las sustancias peligrosas, una calavera con dos huesos entrecruzados. Según se dijo más tarde, ninguno de los fatídicos sobres llegó a ser depositado en los buzones de Marina del Mar, pero se ignora si pudo haber comenzado los envíos en otras localidades...
Aunque pueda parecer increíble y casi de ficción, esta mujer de 50 años fue arrestada el pasado domingo 23 de agosto de 1998 en Marina del Rey, California, tras ser encontrado en su poder más de cien bolsitas de plástico llenas de cianuro. Schoonover, preparaba las bolsas como si fuesen muestras de productos vitamínicos dentro de folletos publicitarios. Cada una de las bolsas iba incorporada a un folleto que promocionaba supuestas sustancias nutritivas, compuestos para mejorar el rendimiento atlético y para adelgazar (y tanto...). El incidente de esta tranquila localidad, situada a unos dieciséis kilómetros de Los Ángeles, obligó a poner en estado de alerta a todas las oficinas de la región. La terrible mujer pensaba enviar los sobres con cianuro por correo a destinatarios de todo el país, elegidos al parecer, al azar... Fue descubierta accidentalmente por un usuario de la oficina postal, al que llamó la atención ver cómo la sospechosa llenaba las bolsitas plásticas con polvos de un recipiente marcado con los típicos signos de peligro que identifican a las sustancias peligrosas, una calavera con dos huesos entrecruzados. Según se dijo más tarde, ninguno de los fatídicos sobres llegó a ser depositado en los buzones de Marina del Mar, pero se ignora si pudo haber comenzado los envíos en otras localidades...
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